viernes, 5 de noviembre de 2010

IDENTIDAD SUPERFICIALIDAD MISANTROPÍA

Ejercicio de negación

IDENTIDAD, SUPERFICIALIDAD Y MISANTROPÍA
En nuestros días la identidad ya no es una responsabilidad moral de unificación con nuestros semejantes, dentro de la sociedad  es un concepto tan fuerte que sirve de bandera de lucha para la estratificación cultural, hoy conductas como la confianza, la seguridad y el respeto las hemos depositamos en una identidad del éxito social y culturalmente aceptado. Como le dicen las personas en su gran mayoría, “el doctor” con saco y corbata no es más que un personaje siniestro y mierdero buscando dentro un espacio su lugar para el ego.
Eres exitoso en la medida que los demás te reconozcan y validen como una persona de éxito y para ello es necesario el manejo adecuado de esa imagen impuesta por los mismos “reconocedores” pero, ¿qué pasa con las demás personas? Los demás entran a ser los antagonistas sociales, la misantropía de esa identidad exitosa se refleja en ellos, la imagen de miseria es “la otredad cultural”. Esa otredad no es más que la categorización que permite elevar un falso autoestima lejos de cualquier intención ontológica reduciéndose a un mero problema de superficialidad e interés individual.
La identidad en la posmodernidad es solo un término desvirtuado de toda función cultural convertida en divisor y excluyente social.